«Adoptar ‘big data’ no es un problema de tecnología sino de gobernanza del dato»
La Agencia Tributaria se creó en 1992 con dos funciones principales: facilitar el pago de impuestos y luchar contra el fraude fiscal, cifrado según el Consejo General de Economistas en 26.000 millones de euros. Para hacer posibles ambas actividades de la forma más ágil y eficiente posible el organismo siempre se ha apoyado de forma intensiva en las nuevas tecnologías, como recordó en el Fórum Big Data (organizado por IDG) Alfonso Castro, director de Informática Tributaria de la entidad.
En plena campaña de la Renta de este año, Castro desveló en una entrevista realizada por María José Marzal, directora de ComputerWorld, que este año el objetivo de la Agencia es que nueve de cada diez contribuyentes hagan la declaración de forma telemática. “Este año se han presentado ya 200.000 declaraciones por medios telemáticos, un 20% más que el año pasado, lo que demuestra que los ciudadanos son cada vez más digitales. El primer día que se pudo tramitar la declaración de la Renta se conectaron unos tres millones de contribuyentes, son datos que asustan por su magnitud”, reconoció el directivo, que apuntó que la AEAT es posiblemente la entidad española que tiene un mayor pico de personas conectadas a sus sistemas en momentos determinados.
Castro recalcó el valor de la movilidad en los trámites de la Administración Pública. En este sentido, la Agencia ha renovado por completo su aplicación móvil, que ya permite al usuario poder identificarse a través de esta plataforma para hacer la declaración de la Renta. “Ha habido más de 1,5 millones de descargas de la app y 170.000 ciudadanos han confirmado la declaración de la renta a través de ésta”, reveló el portavoz.
Hacia un uso intensivo de la analítica avanzada y la IA
Castro, quien subrayó que el organismo mide su gasto al máximo, pues “busca aumentar la agilidad y el ahorro a las empresas al tiempo que persigue mejorar la recaudación de impuestos y la lucha contra el fraude”, apuntó que éste está inmerso desde hace unos años en un proyecto de transformación de TI que implica la apuesta por las arquitecturas abiertas.
Asimismo, la entidad emplea desde hace tiempo la analítica avanzada y la inteligencia artificial en ámbitos internos, un uso que ha ampliado a la lucha contra el fraude y al proyecto de la declaración del IVA, la primera iniciativa que realiza la entidad utilizando la tecnología de inteligencia artificial (en este caso la tecnología Watson de IBM) en la asistencia al contribuyente. Un proyecto, este último, que afecta a más de 60.000 empresas. “Decidimos atacar este proyecto de mano de IBM y en concreto en forma de chatbot para ayudar al contribuyente con el lenguaje natural”. Según Castro, en la Agencia están muy satisfechos con el proyecto: “Solo un 14% de las conversaciones iniciadas con el robot acaban con un correo electrónico, el resto se resuelven en el propio chat”. De ahí que Castro espera poder extender este proyecto al resto de la declaración del IVA.
La tecnología como arma para la lucha contra el fraude
Según ha citado en alguna ocasión el director de la Agencia Tributaria la clave del combate contra las irregularidades tributarias pasa por los avances tecnológicos y el uso de datos fiscales. Castro comparte, como es obvio, esta visión. Éste destacó que “sin la implicación de la dirección de la Agencia sería imposible abordar los proyectos de cambio en los que estamos inmersos”.
Para Castro “la tecnología que existe actualmente es más que suficiente. Es muy adecuada y su precio es asequible. Adoptar big data no es un problema de tecnología sino de gobernanza del dato; para poner en marcha estas iniciativas es preciso que haya una calidad del dato, que la información esté a tiempo, etc.”
Muy trascendental es poner metadatos a los datos para que éstos puedan ser consumidos por toda la organización no solo por las áreas TIC. “El esfuerzo de girar hacia el dato no se debe quedar en los departamentos técnicos sino que debe ser abordado por toda la organización. Para exprimir los datos hay que sacarlos de los silos donde están y ponerlos a disposición de los usuarios finales”. “Hablamos de un cambio de paradigma tremendo en agilidad y productividad”, concluyó.
Fuente: www.computerworld.es